Uno de los oficios básicos y necesarios en las sociedades agrícolas era el de molinero. Por sus manos pasaban las cosechas. Generalmente estaban situados en las presas de los ríos o en los mismos ríos.
En Boñar tuvimos tres, hoy ya cerrados y olvidados.
Todavía podemos ver sus "entrañas" a través del de Bienvenido, en la presa del Castaño.
Esta es la fachada actual del molino y este es el Castaño, hoy ni sombra de lo que fue
Solían ser edificios sencillos y cuadrangulares, con una entrada y salida del agua.
En el interior estaban las tolvas y las muelas. Hoy todavía se pueden ver en este molino
Para los que de pequeños entramos aquí y vimos la molienda nos trae buenos recuerdos, así como nuestros baños en el Castaño
El molino abandonado es uno de los signos del cambio de nuestra sociedad.
Así está hoy el molino del Castaño, que ya es una reliquia histórica, desconocida por muchos boñareses.
El molino de Benigno está a mitad de la Corredera. Pude sacar el exterior porque no vive nadie ya allí.
Se ve bien en la foto la salida del cárcavo
Como es normal una presa alimentaba toda la actividad del molino, esta es la de este molino
este es el rodezno de hierro que vi al lado del molino
El tercer molino era el de Quicón, al final de la corredera. Hoy no se puede entrar porque lo impide una verja, así que saqué a distancia lo que era el molino. Me trae recuerdos porque de pequeño iba allá a por la leche con la "cacharra".(lechera para los más jóvenes)
Este es mi reportaje sobre los molinos, que para muchos son recuerdo y para otros novedad.
Del libro: Los molinos tradicionales en la provincia de León, de Joaquín Miguel Alonso.