Estos días de Semana Santa se hace realidad la copla. Por Boñar y los alrededores corre el agua generosamente. Como si el cielo haya abierto sus compuertas.
El pantano ya casi al completo, alimentado por la cantidad de arroyuelos que bajan del monte
El lago de Isoba lleno y alimentado por las nieves
El Arvejal jugando a río grande
El arroyo de Colle por La Losilla
Los rebecos desafiando a la lluvia en el valle de Reyero
El río Porma cerca de Lillo
En el río Torío hasta de las piedras manaba agua
Así de fuerte bajaba
Esperemos que estas lluvias sean beneficiosas y tengamos un verano florido y sin escasez
La nieve es buen augurio.
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