Para descansar un poco de nuestro trabajo de identificación de las personas, nada mejor que reposar nuestros ojos en el verde paisaje de Boñar.Paisaje suave, nada brusco, del que uno se queda prendido. No me extraña que los que pasan por Boñar digan que que pueblo y alrededores tan bonitos.
Desde el pinar de Adrados tiene unas panorámicas excelentes. Cuando alguien quiera ver el pueblo en su extensión traedle al pinar.
Al fondo el lomo de Llamera, que cae suave y ondulado.
Otra vista desde el pinar.
Desde Barrio de las Ollas también se aprecia el verde de los prados y de los árboles. En medio la espadaña del pueblo.
Este verde primavera, contrasta con el gris plomo de las nubes.
Cerramos este capitulillo con el verde del campo de futbol, que tantos partidos vio, desde que era un cascajal hasta hoy que tiene otro aire. Pedro en su blog ha cantado las glorias de este campo y nos ha puesto de relieve la gran afición que hubo en Boñar, que ha dado algun que otro jugador de renombre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario