La mayoría de los pueblos han ido cambiando su fisonomía, gracias al desarrollo y al bienestar. Boñar también. Poco a poco van desapareciendo muchas de sus casas "antiguas". Sin embargo en el paisaje urbano de BOñar todavía podemos ver más de una que en su sencillez y y antigüedad, tienen su encanto y su estética.
En la Corredera, en la carretera, en el centro del pueblo, a las afueras siempre nos encontraremos con alguna que otra, eso sí vacias.
Todas ellas nos llevan al pasado de Boñar. Cuando Bedoya en 1764 decía que Boñar "las setenta casas que tendrá la Villa, todas las diez y seis están cubiertas de teja y las restantes de paja.....", casi podemos ver en alguna de las que quedan las que vieron sus ojos.
En medio de un urbanismo moderno, aséptico y uniforme, de casas pulcras y de limpia fachada, estas casas que andan perdidas entre ellas, no sólo nos recuerdan el pasado, sino que nos alegran la vista con esta arquitectura simple y, por simple, agradable.
Algunas . como vemos ya están colonizadas por las zarzas y las hiedras, lo que les da un atractivo especial.
Como os decía la mayoría de ellas jalonan la Corredera. Os invito a que algún día deis un paseo tranquilo comenzando en el antiguo sanatorio y lo acabéis en la Costona. Seguro que sentiréis la historia de Boñar dentro de vosotros .
Con la casa de Quicón cierro este recorrido por las casas viejas de Boñar. Todavía se ven las muelas del molino.
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